Iglesia católica pide a criminales y sociedad llegar a una “tregua navideña”

En el marco de las celebraciones a la virgen de Guadalupe y las fiestas decembrinas, la iglesia católica hizo una singular invitación tanto a integrantes del crimen organizado como a los políticos.
El obispo auxiliar de la Arquidiócesis Primada de México ofreció una entrevista a Grupo Fórmula en la que reiteró que, de la mano de los medios de comunicación, los mensajes pueden llegar a los oídos de quienes pueden cambiar el destino del país.
Aseguró que la intención de la Iglesia en México es trabajar por la construcción de la paz.
Durante la entrevista que ofreció a Azucena Uresti, el representante de la Arquidiócesis Primada, Francisco Javier Acero, pidió a los criminales y a los políticos a hacer una “tregua navideña”.
El llamado del prelado invitó a que el 12 de diciembre, fecha en la que se celebra la festividad de la Virgen de Guadalupe, los grupos delincuenciales no ejerzan violencia y que los políticos no utilicen comunicaciones hostiles.
Afirmó que sería deseable que dicha tregua incluya el 24 de diciembre, que es una de las fiestas más importantes para los católicos.
Acero pidió que en estas fechas se deben detener tanto las armas de fuego como las de la boca.
“Dejen sus curules, focos y cámaras, y escuchemos a las madres buscadoras, a los migrantes, a quienes no llegan a la quincena. La política se hace en la calle, desde el servicio”.
El obispo llamó a los integrantes de grupos de la delincuencia a reflexionar sobre sus actos:
“A ti que me escuchas, te pido que esos días dejes de hacer el mal y que el 12, que es día de nuestra madre, lo respetes y pienses qué estás haciendo con tu vida. De ti depende dejar las armas”.
Por su parte, la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) afirmó que la estrategia de seguridad del expresidente AMLO no funcionó, pues no tuvo los resultados esperados.
Señalaron que problemáticas como el tráfico de órganos, las migraciones forzadas y la inseguridad deben ser abordadas con sensibilidad y compromiso.
El CEM expresó su preocupación por las comunidades que han sido afectadas por “la cultura de la muerte” que se manifiesta en la violencia, la impunidad, el crimen organizado, la crisis en diversas instituciones, la pobreza y el deterioro ambiental.
